Matilde Urrutia (1912-1985) fue la tercera esposa de Pablo Neruda. Una mujer importante en su vida, que acompañó algunos de los episodios más significativos de la vida del poeta. Contrajeron matrimonio civil en Isla Negra el 28 de octubre de 1966, y fue la destinataria de algunos de los libros más celebrados de Neruda, como por ejemplo, Estravagario, Los Versos del Capitán o Cien Sonetos:
Matilde Urrutia, aquí te dejo
lo que tuve y lo que no tuve,
lo que soy y lo que no soy.
Mi amor es un niño que llora,
no quiere salir de tus brazos,
yo te lo dejo para siempre:
eres para mí la más bella…
(fragmento de Estravagario)
La reina
Yo te he nombrado reina.
Hay más altas que tú, más altas.
Hay más puras que tú, más puras.
Hay más bellas que tú, hay más bellas.
Pero tú eres la reina.
Cuando vas por las calles
nadie te reconoce.
Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira
la alfombra de oro rojo
que pisas donde pasas,
la alfombra que no existe…
(fragmento de Los Versos del Capitán)
Soneto XLV
Antes de amarte, amor, nada era mío:
vacilé por las calles y las cosas:
nada contaba ni tenía nombre:
el mundo era del aire que esperaba…
(fragmento de Cien Sonetos)
Grandes poemas nacidos de un gran amor. Pero también poesía cotidiana, de celebración permanente. «Un globo para Matilde», fue escrito en La Sebastiana, en Valparaíso, y regalado a Matilde Urrutia en su cumpleaños, el 3 de mayo de 1963. «Me das luz y estás iluminada» dice uno de los versos del soneto, que fuera publicado por el doctor Francisco Velasco, quien compartía la propiedad de La Sebastiana junto a Matilde Urrutia y vivía en los dos primeros pisos de la casa.
Un globo para Matilde
Un año más para la raza humana,
para la calle Prat, para mi tía,
un año más para “La Sebastiana”,
para decir “adiós” o “todavía”.
Un año más, picadito en semanas
por Dios, el Cardenal y Compañía,
un año más, Patoja soberana,
para tu deficiente ortografía.
Pero no para ti, mi bien amada:
me das luz y estás iluminada:
no tiene un día más tu mediodía.
Y aunque hasta las estrellas palidecen
con este amor, los años no envejecen:
tienes un año menos, alma mía.
Te invitamos a conocer «La Sebastiana», uno de los lugares que compartieron Pablo y Matilde, donde fue escrito este hermoso y desconocido soneto. Casa-Museo desde diciembre de 1992, recibe visitantes de todo el mundo que conocen el espacio íntimo de uno de los grandes poetas del idioma español.
