Por Fernando Sáez García
La depresión parece no tener que ver con el fracaso, sino con los fantasmas de los mundos interiores, de ciertas áreas de las emociones que se desbandan de la racionalidad y el supuesto control. Un camino infernal que en este libro queda al descubierto en la emocionante escritura de William Styron. Lejos de deprimir, el recorrido de su lectura apunta a un conocimiento íntimo del autor, pero también y sobre todo, a la evidente fragilidad del animal humano.
Esa visible oscuridad
William Styron
(Hueders, Santiago, 2015)